Las propiedades de la masa de pizza no dejan de sorprendernos a medida que las conocemos. Además de ser un delicioso alimento, adorado tanto por niños como por mayores, puede contribuir a una mejora de nuestra salud.
La masa de la pizza es la base de este alimento, a la que podremos añadir diferentes ingredientes, pero que siempre se sostendrán en su sencillez reconocible. Y es que la masa está formada por elementos tan básicos como la harina de trigo, el aceite de oliva, el agua y la levadura.
Con estos ingredientes, que han acompañado a la humanidad desde hace 10 000 años, elaboramos uno de los prodigios de la cocina italiana. Nuestras pizzerias en León conocen el secreto, y ahora vamos a explicarlo.
Aporte nutricional de la pizza
Veamos en más detalle los ingredientes que nos permiten preparar la extraordinaria masa de la pizza:
- Harina de trigo: Es un aporte fundamental de hidratos de carbono, la gasolina con la que nuestro organismo puede alimentar a los músculos para que desarrollen su actividad. Por otro lado, contiene una gran cantidad de vitaminas, sobre todo A, B3 y B9.
La vitamina A ayuda a la formación de los dientes y tejidos blandos, como mucosas. También es llamada retinol, ya que favorece el buen estado de la retina y mejora la visión.
La vitamina B3 participa en la reparación del ADN y contribuye al funcionamiento del sistema nervioso y del aparato digestivo.
Por su parte, la vitamina B9 o ácido fólico colabora en el crecimiento de los tejidos, en el desarrollo celular y en la creación de ADN, el pilar de la vida. La harina de trigo aporta también, aunque en menor medida, proteínas, grasas y minerales.
- Aceite de oliva: Por todos son ya conocidas sus inagotables propiedades beneficiosas. Sabemos que eleva los niveles de colesterol HDL, bueno para nuestro organismo, mientras disminuye los del colesterol LDL, que puede provocar importantes enfermedades. Por otro lado, previene la diabetes y ayuda al control de la tensión arterial, lo que evita la aparición de trombos. El aceite de oliva es básico dentro de la cocina mediterránea e impregna toda nuestra cultura culinaria. Desde tiempos antiguos, lo hemos usado como aderezo de verduras y en la base de guisos, y se reconoce internacionalmente como un pilar fundamental en la saludable dieta del Mediterráneo.
- Agua: Poco que añadir. El cuerpo humano es agua en un altísimo porcentaje y nuestro organismo la necesita más que cualquier otra cosa. El líquido elemento es fundamental en el proceso de creación de la masa de pizza, ya que posibilita la mezcla del resto de ingredientes.
- Levadura: Se trata de un alimento vivo, formado por hongos unicelulares que consiguen que la masa crezca y se vuelva esponjosa. La levadura, una vez pasa a nuestro cuerpo, ayuda a mejorar los procesos intestinales. Fortalece el sistema inmune y regula los niveles de azúcar. Además, colabora en la salud de piel, pelo y uñas y ayuda a la pérdida de peso.
- Sal: Tomada con prudencia, también aporta beneficios. Estimula el apetito, mantiene equilibrado el nivel de líquidos y mejora el sistema nervioso.
La masa de la pizza, un gran aliado de nuestra salud
Como hemos podido comprobar en este artículo, las pizzas no solo forman parte fundamental de lo que entendemos como dieta mediterránea, sino que nos aportan innumerables beneficios.
Nosotros llevamos a nuestros clientes su pizza a domicilio en León, elaborada con los mejores ingredientes y, por supuesto, con todas las propiedades de la masa de pizza. Combinamos los sabores tradicionales y los vanguardistas para hacer las delicias de los paladares más exquisitos.
